El Dorado Muy Codiciado El Preciado Metal ORO

Construcciones Prehispanicas

El oro ese metal que para los indios era un adorno y utilizado para los rituales y culto a los dioses y que su uso marcaba la jerarquía, logro enloquecer a los europeos que se cegaron de la codicia haciéndolos emprender grandes expediciones para hallar esos tesoros de leyenda, sin importarles pasar por encima de quien fuera con tal de obtenerlo.

NestoryayaGarzon

En Busca del Dorado

No importaban las penalidades, las selvas, los ríos ni las grandes llanuras, las altas mesetas o las altas montañas. 

La búsqueda del oro fue un incentivo en la conquista de las tierras americanas en la primera mitad del siglo XVI, de manera que no se entiende la organización de la hueste indiana de la conquista sin el reparto del botín.

El oro atraía a los conquistadores y los lanzaba a combatir a los indígenas. Lo que anhelaban con verdadera pasión era llegar a los lugares en donde existían tesoros, minas de oro, plata y piedras preciosas, indígenas con multitud de adornos de oro o secuestrar a los grandes caciques para exigir los rescates en oro.

Fue así como la conquista de las selvas amazónicas, los llanos colombo-venezolanos y el interior del Nuevo reino de Granada, como entonces se llamo’ a Colombia, estuvo impulsada por la búsqueda del famoso tesoro de El Dorado y los demás tesoros escondidos por los indígenas.

Las noticias hablaban del tesoro del Inca, escondido en algún lugar de las selvas del Amazonas. Se decía que allí los caciques embadurnaban sus cuerpos de resina, y lo cubrían después con una espesa capa de polvo de oro. Llevado de procesión a la sagrada laguna allí se sumergía el cacique y los indígenas en su ofrenda lanzaban joyas de oro al lago sagrado.

Los españoles buscaron El Dorado en Guatavita, en el tesoro del Metha, el tesoro de Xerira o tesoro de la legendaria ciudad de Manoa en las selvas de la Orinoquia y la Amazonia.

El Tesoro de Manoa

Una historia que se propago en Europa a mediados del siglo XVI contaba que en la expedición española de don Diego de Ordaz en la Orinoquia, un indio les señalo’ a los descubridores la existencia en las selvas de pueblos con mucho oro, perlas y piedras preciosas y un sinnúmero de riquezas. 

Se hablo de la ciudad de manoa, sede del rey dorado, quien se desnudaba con sus caciques tributarios para ungir sus cuerpos con el bálsamo “curcai”, recibiendo polvillo de oro que algunos indios soplaban por unas cañas. Luego se sentaban a beber durante siete días seguidos.

Este espectáculo fue llamado El Dorado, por la abundancia de oro que se vio en las personas desnudas y polvoreadas con el metal precioso. Se decía también que en dichas tierras hasta los niños dorados jugaban con pelotas de oro. 

Las tradiciones de la selva señalaban que en Manoa, “la ciudad dorada”, fueron escondidas las riquezas del inca Atahualpa, posiblemente en la laguna parima. 

Se creía que para llegar a este tesoro era necesario franquear 68 cascadas, muchas de las cuales eran peligrosas. El corsario ingles Sir Walter Raleigh viajo, a finales del sigloXVI, con 100 soldados y cinco navíos para buscar la ciudad dorada de Manoa. Pero esta expedición fracaso pues la utopía de Manoa nunca fue una realidad.

Tesoro del Metha

Fue buscado en los llanos orientales por las expediciones españolas de Diego de Ordaz en 1531 y de Jerónimo Dortal en 1535.Se creía que existía una rica región de oro, “el metha ”, en la cabecera del rio Orinoco y de los demás ríos de los Llanos, en las que se localizaba El Dorado o “casa del sol”, donde los Incas habían obtenido las grandes riquezas que tubo Pizarro en Cajamarca.

Este Dorado apasionó al conquistador Gonzalo Jiménez de Quezada y a su hermano Hernán Pérez de Quezada, quienes se interesaron en su búsqueda. Asimismo, el tesoro del Metha intereso a los alemanes, especialmente a Alfinger, Federman, Hutten y Spira, quienes lo buscaron en los llanos, al igual que al famoso dorado “Xerira” o Mérida.

De esta forma, la conquista del interior del nuevo Reino de Granada giro alrededor de la búsqueda del gran tesoro de El Dorado.

Este fue un aporte histórico tomado del libro Nuestra Historia

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